Comodoro Rivadavia, un paisaje extraño pero con unas centollas memorables!!
El menú de hoy son 442 km. aprox. 6 h.
Después de un día sin sentarnos sobre ningún motor, disfrutando de la playa de Puerto Madryn, estamos como nuevos.
Tal como habíamos quedado con el propietario del apartamento donde hemos estado estos días, a las 9 en punto están en la puerta para entregarles las llaves y revisar que todo ha quedado en orden. Todo perfecto, ha sido un apartamento muy cómodo, bien situado y agradable de estar.
A las 9:30 estamos ya en la carretera, dispuestos para disfrutar lo que nos traiga la ruta.
Nuestro destino de hoy es Comodoro Rivadavia! Me encanta como suena, no? Hay nombres que por el motivo que sea me atraen más que otros, este es uno de ellos.
Esta ruta hipnotizadora… mas y mas kilómetros con este paisaje que… o lo amas o lo odias, por suerte lo estoy amando, tal vez porque me ha enganchado, o porque sé que estoy de paso, o porque estoy camino de… “el fin del mundo”… jolin! dicho de esta forma, da mucho que pensar…
Precisamente, durante el viaje, hoy venia pensando que, de alguna manera, me está recordando al Camino de Santiago. Es un paisaje que te recoge, tal vez por lo inhóspito y monótono y como contra por la inmensidad que tiene, hace que mires hacia adentro. Es un camino sin connotaciones religiosas pero es un “camino” de contacto total con una naturaleza extrema, inmensa, solitaria… contigo mismo.
El viento hoy está soplando más fuerte de lo que estaba previsto, vamos a un lado y a otro de la carretera. Manejar moto por esta ruta no es un juego de niños, la combinación entre un viento fuerte, racheado, cambiando bruscamente de lado y el estado del asfalto que presenta rodadas de hasta 10 cm durante tramos, a veces, largos… complica mucho. Si a esto añades camiones que llegan de frente y que hay que evitar (¡¡) mas un arcén de ripio deslizante… el margen de error se reduce hasta un mínimo. Menos mal que Per es un excelente motoquero!
No quiero ni pensar en su espalda… pobrecita, esta es la que saldrá perjudicada!! Yo voy divina aquí atrás, el culo está duro y se me clava una hebilla pero delante de la tarea de Per, no es grave.
En estos 442 km. no hay ningún pueblo, solo 3 gasolineras. Per ha hecho una distribución extraña… de la primera hemos pasado de largo y después de 2h. hemos parado en un descampado del arcén… claro que había que hacer un pipi… con este panorama de paisaje ya me dirás tu donde me escondo…, la siguiente parada la hemos hecho en una gasolinera, menos mal! y la siguiente en otro descampado donde habían bastantes camiones… aquí de hacer pipi, nada de nada…
Ya hace un rato que me doy cuenta que estamos subiendo, es muy extraño porque no hay ninguna montaña ni nada, todo es plano pero siento que sube y tenía razón, después de esta parada donde los camiones, ha empezado a cambiar el paisaje, hay montañitas y al cabo de un rato, ha empezado la cuesta abajo, cada vez con más montaña, esto nos ha despertado un poco!
Las montañas cada vez son mas raras, son como de arena. A lo largo de la montaña hay como una tubería que a veces se ve y otras queda por dentro de la montaña… no sé qué es eso. Al cabo de un rato, se ve el océano y que llegamos al pueblo.
Es un paisaje verdaderamente extraño, me choca mucho. Las montañas dan la sensación de ser de arena, sin embargo parecen sólidas, de repente creo que he visto un pozo de extracción de petroleo. La entrada al pueblo me deja totalmente sorprendida, es grande y bastante arregladito pero es diferente.
Nada más llegar al hotel, que, por cierto, es fantástico, me he metido en internet para saber un poco más de Comodoro Rivadavia ya ahora lo entendido más.
El tubo que veía en la montaña forma parte de un gasoducto y tienen pozos de extracción de petróleo, justo a la entrada del pueblo… todo esto junto, para mí, ha resultado sorprendente.
Vamos a cenar a un restaurante que nos aconsejó un amigo de Juan en el asado de Zárate, se llama “Puerto Cangrejo”
verdaderamente bueno, comemos unas vieiras riquísimas pero el premio 10 puntos se lo lleva la centolla… que buenaaaa!!! Y nos pensábamos que habíamos pedido poco! Las vieiras no las hemos podido acabar y la centolla la han puesto en dos raciones, enorrrmesss, pero esta tan rico que lo hemos comido todo. Hoy no cabe el postre.
Muchas gracias por la recomendación de este restaurante! Esta centolla la recordaremos por mucho tiempo!!
A la vuelta al hotel hay mucha animación en el pueblo, es viernes y toda la gente esta en la calle, los restaurantes están llenos, los coches van a escape libre, ventanas abiertas y música a tope y una cosa que nos ha hecho mucha gracia y que no habíamos visto nunca es que los carriles de las calles están delimitados por unas lucecitas que se encienden y se apagan, parece una discoteca!
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